de gener 18, 2011

¿Eutanasia?

Creo que será un post breve, conciso, queriendo que sin dolor, pero dolerá. Hace varias semanas vengo pensando en que no es que tenga descuidado el blog. Es que, en realidad, está en coma hace rato, mostrando vida sólo a través de recuerdos, erhm... entradas antiguas.

¿Será que cometo eutanasia para evitar tener esto sufriendo aquí, solitario y sin cuidados paliativos? cada vez que abro la boca (más bien "coloco las manos sobre el teclado") recuerod lo descuidado que lo tengo, y prometo bloggear más. Siempre sucede de todo, creo que los dos últimos años han sido de muchos cambios y seguramente este año también lo sea (porque ya está planificado y toca hacer muchos giros de muchos grados).

Y tengo dos opciones: compartir aquello que sucede y sucederá para bien, con vientos de cambio, o darle cibernética sepultura a este lugar en el cual deposité mis ideas a lo largo de varios años.

Creo que me tocaría pensar (aunque estoy segura que por no practicarle eutanasia, soy capaz de dejarle vivir en coma)

d’octubre 20, 2010

45 horas

Estoy a 45 horas de volver a encontrarme conmigo misma, en la misma ciudad que me vió cambiar mis prioridades en la vida, la ciudad que me armó las situaciones para caer en cuenta, reflexionar y finalmente decir "Es que asi soy yo, y me amo como soy". La ciudad que me vió gritarle "Te amo", por primera vez a otro ser humano, con el corazón manejando las cuerdas vocales. La ciudad que me dió las herramientas para comenzar a pensar más seguido con el hemisferio izquierdo, para ejercitarlo y dejarlo casi como el derecho, mi hermisferio favorito por excelencia e inercia. 

En 45 horas tomaré un vehículo que me llevará a una especie de reunión de mi serie favorita de TV con todos los personajes que la hacían divertida, aunque por motivos de fuerza mayor no se presenta el personaje principal, después de mí misma, aunque sí hace una aparición a la distancia. Te echaré de menos... y podría poner un adverbio de cantidad para acompañar aquella frase, pero aún no sabría decir cuánto, porque seguramente no lo podré contabilizar. 

Estoy a 45 horas de sentir la adrenalina de ir a velocidad, corriendo inerte por el movimiento de aquello que me eleva y me acerca... con más miedo que la primera vez, porque la primera vez no tenía ni idea de nada. Iba en blanco con toda la voluntad y disposición de reventar aquella burbuja y llenarme de ese aire raro que pondría a prueba mis agallas (aunque no sea yo un pez). Esta vez, 45 horas antes, ya estoy con angustias, pánicos, miedos y ansiedades, porque tengo un concepto de lo que puede llegar a ser... pero tengo que ir a terminar un ciclo inconcluso, una vena abierta que necesita una canalización...

45 horas antes ya voy encontrando sentimientos, y estoy sensibilizándome ante estímulos que no llegan aún, pero que avisan de antemano que esto me puede doler, o que me va a saber bien.  Y es aquí cuando, 45 horas antes te recuerdo y leo tus labios decir: "Vamos a vivir el hoy, sin pensar en el mañana..." Paso a paso camino hacia el mañana, viviendo el hoy a pleno. Y este gran paso, me acerca a cumplir una de mis metas más importantes... la que le da el sentido profesional a la frase "cuando sea grande quiero ser..." 

Que asi sea. que esto también me acerca a tí. 




de setembre 21, 2010

Yo no sé uds pero yo...

...cuando tengo una obligación, no puedo concentrarme hasta que la termine. Y eso implica abandonar otras actividades como castigo hasta terminar aquella responsabilidad inconclusa. ¿Soy muy extremista?

Se vale todo

Veo la cinta, y nadie alrededor. Corro sola, y estoy llegando. La victoria es mía. 

de setembre 14, 2010

Mientras tanto, en el salón de la justicia...

...la gente trabajando, siendo productiva, generando dividendos y yo: haciendo una puta tesis aburrida para que me entreguen el cartón que dice que cursé una maestría. Ya estoy cansada de esto, y NO tengo ganas de escribir ni hacer un carajo. Pausa y volvemos.

d’agost 20, 2010

La Lista

La lista es un contrato contigo mismo... no puede ser que se tengan ideas que se lleve el tiempo, y el tiempo se va y no regresa. Hace dos días escribí mi lista... y me siento orgullosa que ya puse en acción muchos de sus ítems. No es justo tener tiempo para todo, cumplir con los compromisos con todo el mundo... pero no tener tiempo para uno mismo y menos para nuestros proyectos personales. Es un contrato personal con uno mismo para no dejar de hacer las cosas que nos llenan plenamente. Es una lista personal, intransferible e ineludible. Y vaya que se siente bien estar en congruencia con el yo...

d’agost 15, 2010

Los seres vivos

Vengo reflexionando hace varios días sobre un tema que me exasperaba hasta que decidí ser parte de la solución completamente. Hablo específicamente de la falta de cortesía, tolerancia y PACIENCIA en esta ciudad. Es increíble como salgo a la calle y me topo con situaciones bochornosas en las que reina el caos y no existe la tolerancia. Les hablo de conducir en esta caótica ciudad. Hay demasiados automóviles debido al bajo costo y la falta de un sistema eficiente de transporte. Hay muy pocas calles y carreteras por la nula planificación urbana. La gente anda acelerada siempre. Si juntamos estas dos situaciones, ¿ustedes qué creen que sale? LA ANARQUÍA que veo todos los días. 

Comencemos por que tenemos dos tipos de ciudadanos: los seres humanos, que saben que viven en un mundo en el que no son el centro de atención y tienen que cuidar y compartir el espacio con los demás, y prefieren vivir en armonía con los demás seres humanos. Y tenemos a los seres vivos, que pierden cualquier característica que los hace humanos, y simple y llanamente viven. Y son BIEN VIVOS. Y confían en que mientras más vivos sean, mejor para ellos. 

Vivimos en un mecanismo de selección natural en el que cada día existen menos seres humanos y existen más seres vivos, los que tienen las condiciones perfectas para sobrevivir y poblar el planeta, eliminando a los más débiles. 


Comienza la despotricadera...

Vuelvo con los seres vivos. Son aquellos que se paran sobre el paso de peatones en una luz roja. También son aquellos que estacionan mal el carro en los estacionamientos. Son aquellos que se sienten poderosos si te adelantan un poquito y se te cuelan en las filas del corredor. Son los que te rebasan cuando haces un alto y tampoco frenan al ver que tú te detuviste porque hay peatones cruzando. Claro, tú te asustas porque estuviste a punto de ser testigo de un atropello. Y si no te asustas, creo que no eres un ser humano. 

Los seres vivos son este tipo de gente que se engancha de la bocina del auto y por todo llaman la atención. Son como una piedrita en el zapato... cómo joden. Yo prefiero hacerme a la orilla, poner mis intermitentes y dejarles pasar. Últimamente adopté hacer algo que me recomendó una tuitera: sacarles un rollo de papel higiénico cuando se pongan a pitar. Ya compré mi rollo de papel higiénico. Cuando lo use, les aviso (a mis lectores imaginarios). 

También son seres vivos aquellos que se van por el hombro y después te tiran el carro para incorporarse al carril. Y puedo apostar que son estos mismos los que colaboran a generar más tranque al pararse en la mitad de las intersecciones. 

¿Saben quienes son las especies dominantes en esta selección natural? Los buseros y los taxistas. Son unos hijos de puta que salen a la calle con el único fin de hacer su trabajo, pero de la peor manera. No respetan ni a su propia madre cruzando la calle y se "aprovechan" de cualquier situación. Los primeros manejan a altas velocidades, hacen regatas, dejan a la gente fuera de la parada (situación en la que el pasajero participa) y un millón más de cagadas. Los taxistas, por su parte, trabajan cuando les da la gana, te llevan donde ellos quieren y les tienes que pagar lo que en ese momento les pase por la cabeza. Jamás cargan el mapa de zonificación pegado en la parte posterior del asiento y si andan de mal humor te cobrarán más aunque vengas compartiendo el taxi con 2 y 3 personas. 

Esta es la clase de ser vivo que sobrevive en esta jungla de cemento en la que sobran los autos, faltan calles. Cero cortesía, cero tolerancia y paciencia bajo cero. 

No permitamos que sigan reinando los seres vivos. Mantengamos a flote nuestros valores y pensemos, porque al pensar y luego actuar es lo que nos identifica como humanos. Tengamos paciencia, que el tiempo alcanza cuando uno se programa. Seamos tolerantes con aquellos que andan un poquito más lento que nosotros, y con aquellos que demoran más en estacionarse o que aun no tienen mucha práctica para manejar, porque también tienen derecho a circular. Seamos conscientes de la realidad, y practiquemos estos tres valores: cortesía, paciencia y tolerancia. De a poquito irá cambiando el panorama, y definitivamente nos sentiremos mucho mejor. 

Tengo sueño, pausa y volvemos. 


d’agost 11, 2010

En mi imaginación...

En realidad nunca he contado con que la gente me lea. Este es un espacio para despotricar, hablar de cosas extrañas que suceden (o no) dentro de mi cabeza, comentar ocurrencias típicas mías... en fin, desahogar cualquier idea que esté pagando peaje por gusto en mis conexiones neuronales cuando puede salir a la carretera de la información. Me divierte escribir de lo que sea, con el fin de... desahogar, precisamente, y quizá encontrar a alguien que se sintiera identificado/da... Pero... creí que a estas alturas del partido alguien me leería... Y si me leen, nadie comenta nada. ¿Será que no estoy loca y por eso nadie me sigue la corriente?

Saludos a mis lectores imaginarios...

d’agost 06, 2010

Circulando...

6:45pm. Salida de Tinajitas del Corredor Norte. Tranque. Hostil. Protagonistas: 6-8 autos (distintos modelos, marcas, colores y tamaños), dos buses de ruta, gente, un niño con uniforme de primer ciclo de colegio oficial.Lo que ví no era surreal, simple y llanamente era. Hablemos de anarquía vial: En la salida del corredor, entre 6 a 8 autos peleabamos la salida, los que seguíamos la fila, los que se querían colar, más el bus de de ruta corredor - (algún lugar de la mancha cuyo nombre no puedo recordar) que quería colarse y dejó pasajeros en la mitad de la salida del corredor. Mientras acelero un poco para adelantar, veo hacia adelante un pavo vestido de camisa celeste y pantalón azul marino cobrando en un bus de ruta, mientras (seguimos en la entrada del corredor) se bajaban unas 5 personas. Seguí hacia adelante y el tranque estaba brutal. Casi no nos movíamos. Allí adelante, en San Isidro, hay una Parada Diabólica (yo creo que por allí se entra al infierno) que genera tranque 24/7, pero no es suficiente para eso. Aguzo la vista... un choque entre tres carros. Y más gente cruzando, a menos de 300 metros de un paso elevado. 


Si Salvador Dalí hubiera venido a Panamá, hubiera pintado esa escena. Pausa y volvemos. 

d’agost 05, 2010

Tolerancia

Después de no recibir por unas dos semanas mis dosis diarias por cuestiones de falta de memoria, me puse a leer las que me perdí, y me encontré con esta que me fascinó.

Fuente: www.dosisdiarias.com

 Yo diría que 3 de 10, y no son algunos: son muchos. Lástima que la tolerancia no la venden en el súper, ni en la farmacia, ni se baja por internet. Pero, al final, los raros serán ellos. Pausa y volvemos.